El caballo de Pura raza Español es originario del sur de España. Su origen no puede establecerse con absoluta fidelidad, aunque si pueden determinarse sus raíces históricas con notable precisión, situandose en el periodo de dominio árabe. En el siglo XIV, la orden de los cartujos, fundada por san Bruno siglos antes, se instaló en Jerez, donde levantó el monasterio de la Cartuja, en este monasterio los monjes se hicieron cargo de sementales perfectamente cruzados entre caballos árabes y nativos, logrando de este modo unos ejemplares de especiales características y de hermosa estética: Los Cartujanos , que definen a los Pura Raza Españoles.
Aspecto: Poseen una cabeza elegante, con un perfil recto o ligeramente cóncavo, sobre un cuerpo bastante robusto, las espaldas son descendientes y el cuerpo bien proporcionado. Los posteriores son anchos y las extremidades son fuertes y a la vez finas. La crin es muy abundante y la cola también es muy tupida con una inserción baja.
Alzada: entre 1,50 y 1,65 metros.
Capa: Fundamentalmente tordo y castaño en todas sus tonalidades. Son muy comunes los tordos vinosos y no se admite la capa alazana
Características: es un caballo especialmente dócil e inteligente. Se utiliza como caballo de silla y en labores del campo, sobre todo en el trabajo con el ganado. También es muy apreciado como caballo de enganche, en exibiciones con ocasión de las ferias y acontecimientos populares. En los últimos tiempos, sus criadores han venido esforzándose y seleccionando sus reproductores para la obtención de un tipo de caballo funcional, con buenos movimientos y aptitudes para el deporte.